Binéfar ha sufrido en apenas ocho días dos tormentas torrenciales de intensidad elevada y que han dejado varios daños cómo árboles arrancados, locales anegados y tejados arrancados. En ambos casos no hubo que lamentar daños personales, aunque sí materiales.

La tormenta de anoche fue más intensa que la anterior al registrarse ráfagas de viento de 80 km/h y caer 14 litros por m2 con una intensidad muy alta de 1.152 litros por m2 y día. La tormenta, que se originó a las 20.50, contó también con granizo y se desvaneció en apenas 10 minutos. El agua, viento y granizo fue muy localizado. En algunas zonas de Binéfar no se notaron apenas afecciones y otras sufrieron la peor parte como la zona más oriental de la ciudad. Allí cayeron árboles sobre la vía pública y también en espacios privados. Seis árboles declarados como singulares, cipreses y carrascas, han sido arrancados.

También la caída de dos pinos sobre líneas de electricidad dejó sin suministro a un centenar de vecinos. La rápida intervención de la brigada municipal de Servicios, la empresa de limpieza y la compañía eléctrica contribuyeron a la pronta recuperación de la electricidad en los hogares. Fue necesario la intervención de los bomberos del parque de Monzón cortar árboles depositados sobre la vía.

Por su parte, la Policía Local atendió numerosas llamadas de vecinos, delimitó las zonas de riesgo con precinto para la seguridad ciudadana y acudieron a atender un accidente de circulación con la salida de un vehículo, fuera del término municipal, en la N 240 en dirección Lérida. Uno de los ocupantes fue atendido por los servicios sanitarios.

En cuanto a locales municipales, un árbol cayó sobre el jardín de la Escuela Infantil Municipal y la planta baja quedó anegada. Las tareas de achique de agua se han desarrollado a lo largo de la noche y la mañana de hoy y el centro educativo abrirá sus puertas este miércoles.

En el colegio de Primaria Víctor Mendoza también cayó un pino de grandes dimensiones, pero no produjo daños y las clases han comenzado hoy con normalidad.

El agua caída, las hojas arrancadas de los árboles y el granizo taponaron los sumideros y se generaron inundaciones en varios locales. La Policía Local registró muchos avisos.

Las ráfagas de viento dejaron también daños en la estructura metálica del aire acondicionado del Centro de Salud

El equipo de Gobierno reunido con carácter de urgencia anoche en el Consistorio activó el protocolo de emergencias del 112. El Ayuntamiento ha contratado empresas de limpieza extras como refuerzo a las tareas de recogida de hojas y árboles caídos de la vía pública.

También se han retirado los numerosos gorriones que fallecieron por la tormenta y que se precipitaron sobre las calles.