Archivo Municipal. Municipio
La extensión del término municipal es de 25,1 Km² y la altitud de la población de 286 m. sobre el nivel del mar. Con casi 10.000 habitantes, ostenta la capitalidad de su comarca, convirtiéndose en el centro neurálgico del comercio, servicios, industria y cultura de la misma. Encontrándose entre los cinco municipios más importantes en población e infraestructuras de nuestra provincia.
Tierra de tradición agrícola, y con una relación empresarial ganadera reconocida a nivel nacional, Binéfar presume de albergar la sede de la Lonja Agropecuaria, como primera referencia del vacuno en España y referente europeo, con cotizaciones semanales. Binéfar también marca la pauta en los cereales para pienso y alfalfa. Empresas punteras en estos sectores, agricultura y ganadería, constituyen un verdadero motor a toda nuestra zona de acción, con un bajo índice de desempleo, colocándonos en el punto de mira de inversores y nuevos emprendedores.
De obligada referencia es la obra del Canal de Aragón y Cataluña (concluida en 1906) que permitió la transformación agrícola del territorio. Su sede reside en Binéfar. Al igual que la Cooperativa del Campo Joaquín Costa y la Litera, que desde 1980, nace con el objetivo de optimizar las labores de los agricultores de la zona. Claros ejemplos de nuestro espíritu de asociacionismo son la Asociación de Comercio y servicios y la de Empresarios de la Litera, pasando por muchas otras, que aportan, con su esfuerzo en el ámbito social, cultural, industrial y laboral, dinamismo a nuestra Villa.
Orgullosos de nuestras gentes, sencillas y trabajadoras, a la par que emprendedoras, hemos contado a lo largo de nuestra historia con grandes personalidades en todos los ámbitos. Basta nombrar a D. Benito Coll, abogado y eminente filólogo aragonés, D. Eduardo LLanas, ilustre escolapio o D. Teodoro Bardají, reconocido gastrónomo conocido por sus libros de recetas. Pasando por los queridos “Titiriteros de Binéfar”, que pasean, orgullosos, el nombre de nuestra población por todo el mundo. Deportistas reconocidos, artistas plásticos de renombre, escritores locales de larga trayectoria, que han contribuido, de una u otra manera, a enriquecer la vida cultural y social de nuestro municipio.
Os invitamos a pasear por nuestro casco histórico, pequeño y recogido en su extensión, pero con muestras de gótico flamígero, última parte del siglo XIV y los principios del XV, representado en nuestra iglesia parroquial, dedicada a San Pedro Apóstol. Huellas de casonas de estilo aragonés, renacentistas del s. XVI en sus calles y cías de almacenamiento de cereales horadando sus suelos.
El urbanismo en Binéfar se extiende más allá de su casco antiguo, con calles modernas y bien planificadas, donde el trasiego comercial y el ir y venir del día a día no cesan. Sus plazas y parques. Colegios, residencia y centro de día. Estaciones de tren y autobús. Centro cultural, recinto ferial y teatro, consultorio médico, entre otros, nos hacen disfrutar de todos los servicios necesarios. Respiramos tranquilidad y acogimiento, pluralidad y hermanamiento.
Somos, los binefarenses, defensores de nuestro peculiar clima. Clima que no conoce todas las estaciones, porque en esta nuestra tierra, pasamos del frío al calor, como dicen nuestros mayores, sin entretiempo, desfilando la primavera y el otoño siempre de puntillas.
La niebla aparece en invierno, días de recogimiento y frío que pronto dan paso los días calurosos en verano, que os animaremos a combatir degustando la gastronomía de la zona en las terrazas al aire libre, disfrutando de nuestra oferta hostelera y la animada vida social de las tardes estivales.
Binéfar cuenta con unas excelentes instalaciones deportivas, para el disfrute de vecinos y visitantes: polideportivo cubierto y pistas de práctica deportiva al aire libre, piscinas municipales y campo de tiro, entre otras. Aficionados al fútbol, habiendo llegado nuestro club a competir en Segunda División B.
Gracias a nuestros clubs deportivos, los niños y mayores pueden practicar una gran variedad de deportes, desde judo a la gimnasia rítmica, pasando por el atletismo, el baloncesto, el ajedrez, el fútbol o el tenis.
No podemos olvidarnos de nuestras fiestas y encomendaciones. Eje de nuestra vida social y cultural.
Dedicadas al Santo Cristo de los Milagros, nuestra Villa, celebra sus fiestas patronales el 14 de septiembre. Fecha que supone poner fin a nuestro particular verano y dar paso al nuevo curso escolar, cada año con mayor ilusión.
Chupinazo y pregón desde el balcón de la casa consistorial, personalidades y Majas de fiestas, ven desfilar a las carrozas y a las peñas en el acto inaugural, que dará paso a unos días de reencuentros y comidas familiares, de jotas, conciertos musicales, carruseles, tómbolas y alegría.
El ferrocarril nos trajo el progreso económico, el Canal nos ayudó con el agua, y nuestra Sierra de San Quilez con olor a pino, carrasca y romero, a pocos km. de la Villa, nos proporciona un aire limpio y fresco. El pulmón de Binéfar, es un lugar para perderse paseando por su camino natural, conocer flora y fauna del entorno y contemplar unas vistas panorámicas desde sus miradores, de nuestro término municipal, que no pasarán inadvertidas.
Nuestra devoción por San Quilez y la Virgen del Romeral, nos hacen protagonizar para Pascua y el mes de mayo, días de romería y procesión, fiestas que gozan de gran atractivo popular.
Somos tierra de una saneada cultura musical, que se plasma en la gran cantidad de formaciones y grupos de diferentes estilos, que año tras año hacen sus pinitos en el mundo de la música. El folclore aragonés lo tenemos excelentemente representado en las diversas rondallas joteras, vivas a lo largo de nuestra historia, apoyadas con la Escuela de Folclore municipal. Dos formaciones de canto Coral y una Escuela de Música culminan este abanico de posibilidades que nos infunde personalidad propia.
Como cabeza de comarca, siempre hemos intentado optimizar y dinamizar el territorio con organización de ferias y festivales, que a lo largo del año se ocupan de promocionar diversos sectores, desde la automoción hasta la hostelería, desde el mundo de los títeres hasta la música y el teatro. Días en los que nuestras calles y Recinto Ferial se llenan de visitantes y con lo que conseguimos darnos a conocer e impulsar la economía local.
Celebramos un mercado mensual, antiguo mercado semanal, puntual cada doce de mes. “La feria”, como nos gusta llamarla, con una oferta de lo más variado. De larga tradición comercial, Binéfar añade esta cita obligada en el calendario a binefarenses y gentes de nuestros pueblos vecinos, que no dudan en acudir y recorrer los comercios y calles peatonales. Comercios grandes y pequeños, modernos y de toda la vida, ropa, calzado, comestibles y colmados, grandes superficies y servicios de todo tipo. Comercio dinámico y parcipativo que da vida y color
Son, pues, muchas las razones que nos empujan a animar a visitantes y vecinos a conocer nuestro municipio, Villa emprendedora, hospitalaria, participativa y fiel a sus tradiciones, que os recibirá, sin dudarlo, con los brazos abiertos.
